Los pecados que no pueden ser absorbidos por el Poder del Amor y el Perdón, parte 3 de 3

Y no Te culpamos a Ti, mi Señor; solo estamos orando. Entonces, por favor, comprende que este mundo no es fácil para nadie. Es más fácil caer en la tentación y hacer el mal que elevarse y recordar Tu Nombre. Este es el sistema de este mundo que arrastra a la gente hacia abajo, y difícilmente pueden levantarse si están abajo. […]

Es muy difícil para ellos (los humanos) despertar y recordarte. He estado intentando arduamente todas estas décadas recordárselo, haciendo lo que he podido. Pero me siento tan frustrada. Tantas veces, me siento impotente. Siento que este mundo se está volviendo cada vez más como un infierno. Algunas partes son un infierno ya. No sé cómo me bendices tanto para que no colapse con todo este sufrimiento del que soy testigo, que no esté destrozada con todo el dolor que siento de parte de los humanos, las personas-animales, árboles, etc., ¡como si su dolor fuera mío! Te doy las gracias por ello - por mantenerme fuerte, al menos parcialmente, mentalmente y físicamente.

Pero muchas personas no pueden soportarlo, mi Señor. Se matan a ellos mismos o se sumergen en la depresión y tienen que usar el alcohol y las drogas, para poder olvidar. Pero cuanto más las usan, más se debilitan, incapaces de mantenerse firmes y protegerse a ellos mismos de todo tipo de ataques. Porque hacia donde miren, solo hay mayormente sufrimiento, dolor y pesar. Y ahora tenemos muchos problemas: desastres y calentamiento global, llamaradas [solares], tormentas [solares]- no solo tormentas de viento o tormentas de lluvia, sino incluso tormentas [solares]. Así que muchas cosas ya están amenazando nuestra supervivencia en este planeta. Lo sabes muy bien. El Ángel Negro no es muy misericordioso con todos los seres en este planeta, porque toda la humanidad, más o menos, hizo algo mal. Solo algunos cambian, se arrepienten e intentan enmendar sus malas acciones, con la Gracia que Tú les otorgas.

Por favor utiliza Tu Poder para despertarlos y que no se pierdan para siempre. Porque esta vez, no serán perdonados tan fácilmente, porque el karma negativo de vida tras vida, los malos pecados se han acumulado en el registro de su existencia. Y no Te culpamos a Ti, mi Señor; solo estamos orando. Entonces, por favor, comprende que este mundo no es fácil para nadie. Es más fácil caer en la tentación y hacer el mal que elevarse y recordar Tu Nombre. Este es el sistema de este mundo que arrastra a la gente hacia abajo, y difícilmente pueden levantarse si están abajo. Y aun si están de pie, son solo, casi como zombis.

No tienen mucho tiempo para pensar demasiado. Están muy ocupados trabajando y cuando vuelven a casa, tienen que ocuparse de las compras, el lavado, los niños, los ancianos y los enfermos. Y comen las cosas equivocadas, como las cosas de personas-animales. Por tanto, se enferman todo el tiempo. Tienen que ir al médico, ir al hospital y soportar mucho sufrimiento también. Por todo lo que tienen, deben trabajar con sudor, lágrimas y sangre incluso. Esta vida los castiga tanto, que aun si están enfermos, no pueden detenerse a tomar un descanso. Trabajan muy duro, pero a veces suceden cosas en que lo pierden todo y quedan sin hogar. Aun si tienen un hogar, no tienen dinero para pagar la mínima comodidad para mantenerse calientes, para mantenerse a ellos y a sus hijos cómodos y alimentados, o incluso que asistan a la escuela. Esta vida no son los Cielos, mi Señor. Las almas que vinieron aquí están siendo oprimidas, envenenadas, engañadas para que no puedan pensar más. Incluso pierden la fe en los Cielos, y entonces no le temen al infierno, porque no conocen ninguna de estas cosas.

Y nadie en el Cielo entendería el dolor y la pena que la humanidad tiene que padecer, eso sin no mencionar a las personas-animales que han sido encadenadas, confinadas en jaulas tan pequeñas que no pueden siquiera darse la vuelta en todo el día, toda la noche, toda su vida, hasta que son asesinados en algún oscuro rincón del mundo en medio de tanto dolor y tristeza. Este mundo no es un lugar fácil para que sobreviva cualquier alma, mi Señor. Por favor, por favor reconsidéralo nuevamente y permíteles una oportunidad de despertar. Por favor utiliza todo Tu Poder, Tus Medios para despertarlos. Úsame de la forma que puedas. Mátame si eso les ayuda a despertar. Una persona muere, muchas personas viven - no importa, mi Señor. Puedes destruirme, esparcir mi alma por todas partes como si fuera uno de esos pecadores que van a experimentar esa clase de destino aterrador - perdidos para siempre, ¡si eso ayuda a todos los seres a ser librados del sufrimiento y a ser liberados, para ir a Casa! Si ellos sufren, ¿¡cómo voy a disfrutar yo!?

Este mundo no es el paraíso, mi Señor. Por favor recuérdalo. Las almas no sabían lo que iban a enfrentar hasta que vinieron aquí. Y una vez que llegaron aquí, es difícil para ellos regresar debido a tantas trampas, tantos trucos, tantas tentaciones, tantas exigencias que no sabían que existen en los Cielos. Ellos no sabían cómo; y todavía no saben cómo reaccionar ante ellas. Aun si por una fracción de segundo se acuerdan de Ti, muchas otras cosas abrumarán ese pensamiento y lo ahogarán, arrastrándolos a las confusiones y al adormecimiento para ser inconscientes de nuevo.

No tengo más palabras para rezarte. Y Te rezo, Te adoro cada día. Tú lo sabes. Pero mi corazón no puede ser sanado aunque conozco Tu Bendición, siento Tu Amor, y estoy muy agradecida por Ello. Pero mi corazón no puede sentirse feliz porque el mundo entero no es feliz, y la mayor parte de ellos serán castigados severamente en el infierno o dispersados por todo el universo y nunca se volverán a encontrar de nuevo en una sola pieza. Nunca serán capaces de hablar como Te hablo a Ti Nunca podrán rezarte siquiera. Nunca podrán saborear una buena comida, respirar buen aire, ir a nadar, o disfrutar algún sencillo placer físico en este planeta o en cualquier otra parte del universo nuevamente por un tiempo eterno. Perdidos para siempre, esparcidos lamentándose en todas partes. Y entonces incluso reunirlos sería inútil. Como piedras, como guijarros - cualquier cosa menos un ser viviente decente como los humanos aquí y las personas-animales o incluso los árboles.

Querido Dios Todopoderoso que todo lo sabes, no sé por qué hablo tanto. Es solo que al hablarte a Ti, espero que escuches y ayudes a la humanidad, por favor. Por favor no gires Tu Cabeza y Te apartes de ellos. Esta vez, se siente como un tiempo eterno, pero acabará. No sé cómo demostrárselo a la humanidad, para que ellos Te escuchen, para que Te adoren, que se arrepientan ante Ti, y vuelvan a ser niños buenos, como cuando nacieron de Tu Gracia en el Cielo.

Hablo Contigo porque no tengo con quien hablar. Llevo cuatro años de aislamiento. Estoy sola en esta forma de vivir como en un ‘estudio’ aquí. Ya sabes, una habitación, una cocina, un lavabo. Eso es todo lo que necesito, en realidad. Es mucho mejor que muchas personas que no tienen una casa, que viven en la calle, en algún terrible desierto caliente o en tierra congelada como refugiados con un plástico sobre sus cabezas y alimentándose de cualquier cosa que puedan mendigar, lo que les den. Ellos no tienen a dónde ir; sin hogar; ni mucha esperanza para el mañana.

Siempre estoy agradecida por todo lo que Tú me das, mi Señor, siempre agradecida. No necesito mucho, de verdad. Pero pensar que este hermoso planeta se va a convertir en polvo, se va a convertir en ceniza, que va a dejar de existir, realmente me duele en el corazón. Sólo ver esa visión de que este hermoso planeta ya no existe, perdido para siempre de esa manera. ¡Nadie puede soportarlo, nadie puede soportarlo! Porque toda la humanidad, o la mayor parte de la humanidad, tendrá demasiado sufrimiento, después de dejar este planeta, porque no habrá más planeta. Sólo pensar en eso, me duele tanto.

Aunque pueda ver el Cielo, pueda sentir Tu Amor y Bendición, pero innumerables seres no. Oh, Dios mío. ¿Hay algo más que pueda hacer? Por favor, cambia este sistema. Por favor, perdona. Por favor, despierta a los humanos. Por favor. Por favor, no dejes que se vayan, así como así. Ellos son Tus hijos, mi Señor. Simplemente no saben cómo ser buenos. Esta vida los ocupa demasiado y los arrastra a una profunda ignorancia.

Sé que has enviado a Tus Hijos e Hijas a este mundo innumerables veces, pero ¿cuántas personas Los escuchan? ¿A cuántas personas pueden llegar? ¿Y cuántos siquiera Les creen, incluso si llegaran a Ellos? Porque han estado tan vendados, desde siempre aquí, aunque todavía parecen vivos, pero están medio muertos. No sé a quién contárselo, así que hablo Contigo. Siento agobiarte, mi Señor. Pero no puedo... No puedo no decírtelo.

¿Qué otra cosa puedo hacer? Lo he intentado de muchas maneras. Y Tú me has ayudado a intentar muchas maneras también, pero no parece ayudar demasiado, no tanto como a Ti Te gustaría, no tanto como Yo esperaría. Ya no sé qué más decirte. Que seas bendecido. Que seas feliz, mi Señor, con lo que puedas serlo.

Ojalá reconsideres Tu Plan para todos los seres de este planeta. Bendito seas, mi Señor – Dios Todopoderoso, el Altísimo, el Más Grande, el Más Misericordioso, el Más Amado, el Más Benevolente, el Más Indulgente, Señor Todopoderoso. Te agradecemos de todos modos por todo lo que nos das, y entendemos todo lo que lo que sea que pase, Tú nos lo entregas. Es sólo... es sólo que no es fácil de aceptar. Te amamos. Te amamos, por siempre Te amaremos. Gracias. Gracias. Te amo, Te amo. Amén.